Labrador Retriever
Originario de Terranova (Canadá), el Labrador Retriever fue criado inicialmente como perro de trabajo para ayudar a los pescadores a recuperar redes y presas en el agua. Más tarde, en el Reino Unido, se perfeccionó como perro cobrador. Hoy es una de las razas más populares del mundo gracias a su inteligencia, carácter amistoso y adaptabilidad.




Cuidados y recomendaciones
Familias, deportistas o primerizos: Excelente elección para dueños sin experiencia.
Entrenamiento muy fácil: Extremadamente inteligente y motivado por premios y juegos.
Ejercicio diario necesario: Disfruta de caminar, correr, nadar y jugar. Ideal para personas activas.
Compañía constante: No le gusta la soledad. Necesita interacción diaria y afecto.
Cepillado regular: Muda moderada durante todo el año. Requiere mantenimiento básico.
Salud: Control veterinario frecuente. Propenso a displasia de cadera y problemas de sobrepeso si no se regula su dieta.
Tamaños en edad adulta
Temperamento: Sociable, alegre y confiado.
Personalidad: Leal, cariñoso y siempre dispuesto a complacer. Se lleva bien con niños, adultos, otros perros y mascotas.
Cuerpo: Fuerte, compacto y atlético. Cola gruesa de “nutria” y patas diseñadas para nadar.
Pelaje: Corto, denso y resistente al agua. Colores comunes: negro, chocolate y amarillo (desde crema claro hasta dorado).
Estatura y Peso en Edad Adulta
Machos: 56–61 cm | 29–36 kg
Hembras: 53–58 cm | 25–32 kg